Llevo redactando este post cerca de 3 meses, durante los cuales he estudiado los comportamientos de multitud de cuentas de Twitter, ya sean particulares, de empresas o incluso instituciones.
Al principio puse ejemplos reales en cada uno de los 50 tipos, pero más tarde pensé que sabrás identificarlos perfectamente, así que mejor me callo, y de paso me ahorro algún problemilla. Por supuesto muchos perfiles encajan en más de un tipo.
¿Preparado? Estos son los 50 tipos de usuarios que he identificado.
- Amargado: Nada le sienta bien, todo son negativas. Todos los días son horribles y siempre le pasan cosas malísimas. También conocido como “Cenizo”.
- Amigo: De estos hay pocos, como en la vida real, pero se agradece su e-presencia en ciertos delicados momentos.
- Aplicado: Tuitea siempre a las mismas horas y sobre los mismos temas en los que es experto, convirtiéndose en referencia en ciertos momentos del día.
- Ausente: Nunca responde porque realmente ni entra a Twitter. Se rumorea que no tiene ni tan siquiera instalada la app en su móvil. Eso sí, cuando le preguntas, es tuitero.
- Auténtico: Dice lo que quiere, cada vez que quiere y con el estilo que quiere. Y siempre se supera.
- Avestruz: Sigue a mil cuentas, pero no tuitea.
- Ayudador: Dispuesto a echar una mano, de calidad, a cualquier pregunta que se lanza al aire. Ejemplares como este hay pocos.
- Buenrollero: Contagia optimismo del bueno, de ese que te da ganas de hacer cosas. Suele ser multitemático y en todos los temas suma.
- Cachorro: Sigue a pies juntillas las doctrinas de su partido y no le importa quedar, cada dos por tres, con el culo al aire. Nunca rectifica.
- Cobarde: Critica mucho, pero nunca a la cara, jamás menciona y lanza gritos al espacio cósmico.
- Consejero: Se pasa la vida en Twitter dando consejos que a todos nos gustaría saber si se aplica a sí mismo.
- Copia: Sólo hace RT clásico, sin aportar nada. Primo del “Spammer”.
- Falso: Hace la pelota a cualquier cuenta que tiene más de 1.000 seguidores. Es capaz de decir una cosa y la contraria en dos tuits seguidos sin despeinarse. Resta.
- Filosófico: Su vida ronda en torno a las frases de Descartes, Platón, Paulo Coelho, Churchill, Walt Disney y Woody Allen.
- Futbolero: Habla de fútbol, todo el fútbol y nada más que fútbol.
- Gastrónomo: Nos hace babear con sus recetas, restaurantes y viajes gastronómicos. Recomendado no seguirle cuando tienes hambre.
- Guadiana: Típico tuitero que aparece en campañas electorales.
- Gurú de pacotilla: Este me encanta, sabe de todo. “Profesionales” todo tipo reconvertidos sin pudor en expertos en Social Media.
- Gurú real: Cuando abre la boca (tuitea en este caso) nos deja a todos callados un rato, asimilando las verdades que sólo a ellos se les pueden ocurrir. Escasísimos ejemplares.
- Hipercrítico: Reparte leñazos a diestro, algunos merecidos, todo hay que decirlo. Pero, ¡Ay de tí si le criticas!
- Humorista: Te alegran el día con sus chistes y coñas constantes. Algunos rozan la genialidad.
- Imitable: Mantiene comportamientos que a muchos nos gustaría imitar. Es un espejo en el que mirarse. Su uso de Twitter es maestría pura.
- Imitador: Lo contrario del ejemplo de arriba. Copia lo que a otros les funciona, con la consiguiente mofa general.
- Implicado: Cree firmemente en un tema en concreto, lo defiende a capa y espada, con buenos y claros argumentos. Consigue generar empatía con el resto, arrastrándolos a su causa.
- Imprescindible: Sin estos, Twitter sería como las esquelas de un periódico de los 80. Aburrido a rabiar.
- Interesante: Habla poco, con frases cortas e impactantes. ¿Es o se lo hace? Nunca lo sabremos, porque deja verse bastante poco.
- Irascible: Piensa que cualquier tuit va por él. Todos le tienen manía, como esa profesora de EGB que te dejó Matemáticas para Septiembre.
- Ligón: Le tira a todo lo que se mueve. ¿Quién necesita Meetic o Badoo teniendo Twitter?
- Listillo: Sabe de basket más que Antoni Daimiel, de ciencia más que Carl Sagan y de cine más que Boyero. Pero no.
- Literario: Fotos de frases son su mayor aportación,
- Meteorólogo: Nos da los buenos días montado en un anticiclón. Se sabe las máximas, las mínimas y la humedad relativa.
- Metomentodo: Entra en las conversaciones ajenas sin aportar más que perogrulladas. Muy diferente a ese otro tuitero que cuando aparece aporta valor.
- Motivador de todo a 100: Se ha aprendido cuatro frases de coachs americanos de tres al cuarto y las repite como mantra para regocijo del personal. Se le presupone depresivo.
- Narcisista: Se hace fotos que parecen espontáneas pero han llenado su SD de pruebas que no valían. Nunca sale mal en ninguna. Se gusta.
- Novato: habla con otros tuiteros sin mencionarlos, pero no intencionadamente como el “Cobarde”
- Oligofrénico: Ese que nunca dice nada y siempre tiene preparado un “te lo dije”. Idiota e imbécil. Poco más y nada menos.
- Optimista: Comienza cada día realmente motivado y eso se nota. Muy diferente del “Motivador de todo a 100” que inunda nuestros TL. Sabe cómo
- Original: Amigo del “Humorista” pero con un plus especial que me cuesta definir. Cada tuit es una obra maestra. Must.
- Pesado: Tuitea a lo metralleta, sin cabeza, suscrito a cientos de feeds RSS que inundan su y nuestro TL. Primohermano del “Copia”.
- Preguntón: Vive preguntando, obtenga o no respuestas.
- Remoto: Tuitea gracias a que tiene conectada la cuenta con su Facebook. Y ya.
- Runner: Tiene conectada su app de correr con el Twitter. A veces satura. Es pronador.
- Santo: Conoce el santoral de cabo a rabo y comienza cada jornada felicitando a las Martas diarias.
- Selfies: Habitualmente expertas en moda con posados de lo más risueños. Por la risa que producen, claro.
- Spammer: Sólo habla de él o de su empresa.
- Trolls: Don’t feed them.
- Tuerto: Mucho peor que el ciego, que no ve nada, es este tipo, que sólo ve lo que quiere ver. Se encuentra más frecuentemente en ambientes políticos o deportivos.
- Valiente: Se atreve a decir lo que muchos pensamos pero no nos atrevemos a decir. O no podemos por cualquier motivo. Hacerle RT es un descanso.
- Veleta: Critica y elogia según el día. Poco coherente. Tirando de hemeroteca se le caza al vuelo. Peligroso.
- Voyeur: No tuitea, pero lo lee TODO. Se sabe Twitter de memoria. Cuando te lo encuentras por la calle te pregunta por tu vida.
Espero que estén todas las posibilidades, si falta alguno, te pido que me lo digas y ampliemos la lista.
Foto de marke.sotak