He estado un buen rato dándole vueltas al título de esta columna. Normalmente lo primero que hago es pensar en un tema, me sale una frase rápida para poner como cabecera a la redacción y me lanzo a escribir. Pero hoy ha sido diferente, he dudado hasta el último momento si debía ser como puedes ver ahí arriba o mejor al revés: “Google según España.” La verdad es que aún no tengo claro si el orden de los factores altera en este caso el producto, lo deja parecido o no tiene nada que ver una cosa con la otra.
El caso es que en el pasado 2017 lo que más buscamos los españoles en Google fue lo siguiente: Cataluña, Atentado Barcelona, Bimba Bose, Puidgemont, Ángel Nieto, Eurovisión, HBO, Carme Chacon, iPhone 8 y Despacito. En este orden. Una buena radiografía de la situación actual, ¿no?
Pero antes de sacar precipitadas conclusiones, vamos a analizar el mismo ranking en los dos años anteriores. En 2016: Juegos Olímpicos Río, Eurocopa, Pokemon go, iPhone 7, Elecciones EEUU, Donald Trump, Diana Quer, Eurovision, David Bowie y La Veneno. En 2015: Gran Hermano, Eurovisión, Supervivientes, Elecciones, La Voz, París, Charlie Hebdo, Eurobasket, Jurassic World y Elecciones Municipales. La cosa se va clarificando, ¿no?
Echar la tarde en Google te permite encontrar joyas enormes. Puedes, por ejemplo, analizar las preguntas más habituales que se lanzan a este buscador que por momentos debería cobrar un extra de psicólogo-psiquiatra-colega de barra de bar.
Desde las superficiales: “cómo ser popular”, “qué hacer cuando estás aburrido” y “cómo ser guapa” hasta las más pragmáticas: “cómo evitar la caída del cabello”, “qué pasaría si no hubiera Luna” y “cómo saber si me roban el wifi”. Todas ellas pugnan en el escalafón de lo más buscado en los últimos años con otras perlas estilo: “qué es hacer la cobra”, “cómo hacer torrijas” y “qué es la CUP”.
Si somos lo que preguntamos no hay duda que el internauta español es morboso por naturaleza (varios muertos en las listas) y zoquete por antonomasia (telebasura a cascoporro). Tampoco hay duda de que Steve Jobs estaría orgulloso de nosotros. Justo lo contrario que cualquiera de los responsables de educación y cultura nacionales que hemos tenido en nuestra joven democracia.
UN TUITERO EN PAPEL
Nacho Tomás
www.nachotomas.com
Artículo publicado en La Verdad de Murcia el 28 de Febrero de 2018