Desde que empecé en esto de las Redes Sociales me dí cuenta de que algo olía mal en la mayoría de artículos sobre el tema que puedes encontrarte por internet. Muchos de ellos, apelando al corte periodístico más burdo, recurren a topicazos dignos de un anuncio nocturno de teletienda. Al principio los leía con interés, después con sopresa, y finalmente con vergüenza ajena. A día de hoy puedo afirmar que estoy harto de los «Errores imperdonables del Community Manager», «Los 10 pilares básicos del Social Media», «Lo que nunca debes hacer en Facebook» o «7 pecados básicos al comenzar en Twitter». Y casi tan harto también de los que los comparten por las redes como poseídos, posiblmente sin haberlos leído. Todos ellos son artículos unidireccionales: Sólo envían, no reciben.
Echo de menos en estos artículos el punto de vista comercial. A casi todos se les olvida que lo importantes es vender. A casi todos se les olvida que las Redes Sociales, haciendo de ellas un fin, no son más que otro medio para llegar a este objetivo. Es triste ver que, por extensión, muchas cuentas de empresa están gestionadas por personas que leen, y aplican, estos artículos.
¿Quién se puede permitir decir que es malo poner cierta foto, escribir de cierta manera, publicar a ciertas horas o hacer lo que nadie ha hecho antes? Si has tenido experiencia en la publicidad o las ventas, sabrás que no todo funciona para todos, que cada producto se debe comunicar de una manera, que cada potencial cliente te mira con sus propios ojos.
Un buen trabajo consiste en vender, no en hacer sólo Social Media. Un buen trabajo consiste en usar estas herramientas de un modo enfocado al cliente. Un buen trabajo consiste en usar estas herramientas de una manera adecuada, tal como otras.
En resumen, las Redes Sociales unidireccionales no son nada. En cambio, son útiles cuando se bi-direccionalizan. Y son mucho cuando las agitas en una cocktelera que contiene formación, fuerza de ventas, marketing, orientación comercial y ganas, muchas ganas..